Fue en San Bernardino, California, que Manson, en silla de ruedas debido a la recuperación a la que se ha sometido después del accidente que sufrió hace unas semanas, roció al público con balas falsas con un rifle semi automático también falso. Esto fue solo horas después de una matanza ocurrida en Texas, donde un hombre asesinó a más de 20 personas en una iglesia de Texas. Por si fuera poco, la ciudad donde se estaba presentando también sufrió un atentado terrorista en 2015.

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En un comunicado a Variety, Manson comentó que el acto solo tuvo un carácter teatral y que lo que trataba de hacer era demostrar la facilidad con la que se puede obtener un arma en tiempos en los que hay matanzas cada vez más frecuentes.

Han sido días difíciles para Manson, pues hace unos días murió Daisy Berkowitz, miembro fundador de la banda; y el bajista Twiggy Ramírez, acusado de violación por su ex novia, fue expulsado de la alineación.

Fuente: Consequence of Sound